Eres Valiente, de Mónica Escobedo (2015)
Temas: Impuntualidad, Radio Ibero, inglés, “tons?”, soltería, Canadá, mariguana, taxis, novios, “mamitis”, Stand Up, sexo anal, “chichifo”, drogas.
Disponible: Amazon Video.
¿Qué significa para mí este especial?
Mónica Escobedo es una gran representante del Stand Up en México. Ya sea con sus rutinas, con los programas y participaciones que ha tenido en Comedy Central, además de diversos vlogs y podcasts en los que ha participado. Con una exitosa carrera en la radio (en Los 40 Principales, dato que obviamente sabía antes de hacer esta reseña), probablemente sorprendió al mundo del espectáculo cuando empezó a hacer Stand Up. Pero dicha “sorpresa” se convirtió en una grata revelación, al convertirse Mónica en la primera mujer en Latinoamérica en contar con un especial completo en Comedy Central.
Sí, habían habido participaciones de varias mujeres comediantes, pero tener un show dedicado a una mujer, no era lo común. Obviamente, esto abrió camino para que la gente empezara a ver y apreciar a otras comediantes. No solamente eso: Eres Valiente hizo que Escobedo se dedicará de lleno al Stand Up, pasando los programas antes mencionados a un segundo plano. O sea, los sigue haciendo, pero su enfoque está concentrado en la comedia en el escenario. Esto no se logra con un especial cualquiera, sino con uno muy bueno. ¿No me creen? Prepárense, que esto ya va a comenzar.
El Especial
Después de la introducción de Comedy Central, vemos a Mónica Escobedo en su carro, durmiendo en él. Definitivamente no creo que sea su realidad al momento de grabar el especial, y probablemente no fue en algún momento de su carrera, pero seguramente algún(a) cómico(a) sí se podrá sentir identificado(a). Vemos a Mónica prepararse para el especial, sube al escenario en aplausos, y empezando se pregunta si ya todos habrán llegado. Porque en México hay gente impuntual (entre ellos, muchos de este equipo, incluyendo al que escribe), y a ella le molesta mucho. Cuando va a un show, y llega a la hora que dice el flyer, los meseros le hacen bullying por haber llegado “temprano”. Porque sí, en México, “llegar temprano” es “llegar a la hora indicada”. Pero donde más se sufre, es en la oficina. Porque, aunque digan que la puntualidad, y que la madre, siempre hay que “esperar a que lleguen todos”. Lo que es peor: los que llegan tarde, ¿lo hacen con remordimiento? Para nada, llegan de lo más casual, descansados, y bien arreglados. Porque mientras sigamos solapando esas conductas en nuestro país, seguirá habiendo gente que, no solamente no se sienta mal de llegar tarde, sino que, ¡lo hagan con alevosía y ventaja!
Pues resulta que sí, esta fue la realidad de Escobedo por un tiempo. Entre la falta de oportunidades, la experiencia que tenía en ese entonces, y los contactos que tenía, ¡ella estaba viviendo en su coche! A final de cuentas, un amigo le marcó, y ella representa la llamada, de la manera que todos lo hacemos, pero que es necesario preguntar, ¿lo hacemos bien? Total, fue a la audición, y Escobedo consigue su primer trabajo, en Radio Ibero. Puede sonar cómo algo interesante, pero hay que tomar en cuenta que, viniendo de escuelas públicas, Mónica Escobedo no era la mejor personificación de una persona que hablara inglés. Afortunadamente, su productor la quiere ayudar, y le da unos consejos. Los intenta seguir, sin éxito y, como es de esperarse, no funcionan, y la despiden. Para que sea todavía peor, está regresando a su departamento, triste, sin trabajo, y le llega un mensaje: cuatro letras, un signo de interrogación: Tons?. Cinco caracteres que, sin decir mucho, lo dicen todo. “Tons?”. Un mensaje que significa poco, pero a la larga, te puede lastimar mucho. Quien lo recibe tiene la opción de no responder, sacando dignidad de dónde se pensaba no había más, marcar línea y evitar salir lastimada (o lastimado, también pasa). ¿Creen que fue el caso con Mónica?
En esta ocasión, no fue así. Vaya, no tiene nada de malo, de vez en cuando, es necesario “caer en la tentación”, sobre todo cuando llevas mucho tiempo de soltería. Pero mientras se preparaba para la visita, se daba cuenta que el estar sola ya estaba pasando mella, específicamente en su ropa interior. Así que, después del “tons?”, se replantea su vida, y se pone una nueva meta: aprender inglés. Y no solamente entró a una escuela de inglés de las que “en un año ya sabes 100% de inglés”; después de terminar su curso, se fue a Canadá para “reforzar” los conocimientos. Uno de los consejos que le dieron fue que no se juntara con otros mexicanos, para que se forzara a hablar inglés. Escobedo es obediente, ¡claro que sí! Así que solamente se juntaba con otros latinoamericanos. Total, el curso iba bien, lo estaba aprovechando, estudiando mucho, sacando buenas calificaciones. Pero para la segunda parte del curso (de dos meses), decide relajarse, y se va de fiesta con unos brasileños. Ella pensando que iba a “ligar”, hasta que vio en plena fiesta que sacaron mariguana, y todos iban a dar un toque. Obviamente, por educación Mónica Escobedo no se quedó atrás, y le dio un “llegue”… Fuerte. Pero fuerte, de verdad. Tanto, que le dieron ganas de… De irse. Ya saben, la mariguana y sus efectos
Así que, emprende la retirada en taxi (no habían plataformas en ese entonces), pero entre el mal viaje, el aspecto y el lenguaje del conductor (era hindú), Mónica pensó que le iban a hacer algo. ¡Ah! Porque no era solamente el taxista, también se “unieron” unos afroamericanos en un Tsuru (en Canadá… ¡esa hierba estaba potente!) Así que, con todo esto en mente, mejor se relajó, y no pasó nada. ¡Obvio no! Con el nervio y la paranoia a todo lo que daba, decidió, ¡tirarse del taxi! Le valió madres su integridad, ella tenía que ponerse a salvo del “peligro” en que estaba. Total, que sale volando del vehículo, se lastima en varios lados, ¿y qué hizo el “siniestro” taxista? Se acercó a ayudarla. Claro, porque cuando quieres violar y/o asesinar a alguien, te preocupas por su seguridad. Resulta que el señor, súper buena onda, la ayudó a subirse al taxi, y empezó a platicar con Escobedo, que se moría de pena por lo sucedido. Lo positivo es que, durante la conversación, el señor le comentó que estuviera tranquila, porque todos los taxis de Canadá tienen cámaras conectadas a la estación de policía, así que podían ver todo lo que pasaba dentro de la unidad. Tal vez eso la hubiera calmado, pero con el ridículo que se acaba de “aventar” (¿vieron?), ¡esa opción ya estaba descartada!
Así que, con todas estas experiencias y aprendizajes, Mónica Escobedo regresa a México. ¿Valió la pena el viaje? Con sólo subirse a la radio del taxi (ya en sus cinco sentidos, afortunadamente), y poder entender una canción ochentera en inglés (que sé cuál es, pero no sé cómo se llama). Así que, con el conocimiento y la confianza a cuestas, consigue trabajo en Los 40 Principales para entrevistar a las estrellas pop del momento. Si este logro no fue suficiente para decir que valió la pena el viaje a Canadá, ¿qué les parece el hecho de que consiguió novio? Es que vaya, cuando uno está enrachado, se nota. Lo malo, es que no eran los mejores prospectos: que si el novio bisexual, que realmente era gay (pero él no lo sabía); que si el que no estaba “bien dotado”, pero el peor, definitivamente, el que tenía “mamitis”. Amigos, si de por sí no es nada agradable esa “condición”, mientras más viejos se vuelven, ¡peor se ven! Sí, definitivamente que todas estas cosas son para ponerse a llorar, pero no en el caso de Mónica. ¿Qué hizo con todo esto? Se decidió a hacer Stand Up. Total, entre las experiencias que había vivido, y la influencia “transgresora” que traía de Canadá, ¿qué podía salir mal?
Sexo anal. Ese fue el tema con el que Escobedo decidió hacer su debut ante los micrófonos. Pero, la verdad, la rutina no es escucha mal (pero siempre un(a) comediante será su peor crítico(a). Además, cumple una doble función, porque también es servicio a la comunidad, para que ambas partes, tanto el “prestador” como el “beneficiario” del servicio pudieran realizar dicha actividad (para la que realizan una lluvia de ideas de los diferentes “apodos” que tiene) con plena satisfacción. Bueno, ¡hasta tutorial hace, con instrucciones detalladas! Eso sí, a pesar de lo divertida que pueda ser la rutina, no es un tema que ha mucha gente le guste “tocar” (¡otra vez! Es que la comedia no descansa), y si no estás cómodo(a) con el tema, difícilmente ibas a disfrutar una rutina de esto. Algo así le pasaba a Mónica Escobedo con su novio en turno, que le molestaban que hablara tan públicamente de esos temas. Además, este sujeto era “chichifo”, o sea, “mantenido”, para los que no sepan (el que escribe, entre ellos). Se preguntarán, con tanta cosa negativa, ¿qué le veía al tipo? Pues, ¿qué se imaginan? ¡Por eso Mónica “soportaba” estas cosas! Porque ella sabe reconocer a esas personas, gracias a sus “amigas” de la prepa, cuando las veía “chichiforear” (¿Lo conjugué bien?) a los señores en el antro.
Entramos en la recta final, y para agarrar valor, se toma un caballito de tequila. Antes de tomárselo, pregunta si tiene alguna droga. Le dicen que no, y en vez de sentirse aliviada, ¡pide que le pongan algo! Ya, en serio, ella ha tenido experiencias con las drogas, tanto de manera voluntaria, como cuando te las ponen en tu trago sin que te des cuenta. Nos relata una anécdota, cuando le hablaron para una entrevista, y ella, buscando fama a final de cuentas, accedió sin hacer demasiadas preguntas. Se encuentran en un bar, y empiezan a platicar, pero después de un tiempo, Escobedo nota que no hay libretas, ni grabadoras, ni nada. El problema fue cuando regresó del baño, le dio un sorbo a su bebida, y sintió un mareo inusual. Afortunadamente, Escobedo tiene experiencia con las sustancias psicotrópicas, así que enseguida planeo su estrategia de escape, la cual puso ejecutar con éxito. Eres Valiente concluye con una muy bonita reflexión acerca de este medio, y aunque nos gustaría pensar que las cosas han cambiado, probablemente estén peor. Pero, como dice Mónica Escobedo: si realmente lo quieres, ¡te tienes que atrever!
¿Qué pasó después?
Si Mónica quería más presencia con su especial, lo logró, ¡con creces! Las participaciones en Comedy Central no hicieron más que aumentar, tanto con sus rutinas, como en Duelo de Comediantes (donde se surtió a Hectorcidio y a Isabel Fernández, pero perdió el invicto contra Coco Celis), y en diversos sketches y segmentos para el canal y en YouTube (suena redundante, lo sé), incluyendo La Culpa es de la Malinche, junto a Alexis de Anda, La Bea, Michelle Rodríguez y Verónica Toussaint (¡estamos esperando la segunda temporada!)
Actualmente, Escobedo también tiene su propio contenido en YouTube, con TBT, en el canal de La H. Plataforma, donde invita a personalidades para platicar de sus trayectorias y experiencias. Además, este año ha estado de gira en diversos estados con su nuevo show. De hecho, hace unos meses estuvo presentándose en Mérida, pero no pudimos coincidir. Esperamos verla muy pronto por aquí de nuevo, pero sobre todo, ¡con un nuevo especial! Definitivamente, Mónica Escobedo: Eres muy valiente, y agradecemos tu presencia en el Stand Up de México.
Frases Memorables de Eres Valiente (en orden cronológico)
1.- “Tons?”. O sea, ni siquiera “hola, ¿cómo estás?”, “soñé contigo, ¿estás bien?”, “te invito un vinito del Oxxo”. “Tons?”. ¿Y qué le contestas? “Pos va”.
2.- (De la mariguana) esa chingadera, es de las que con una fumada, te vas a Júpiter, y regresas viendo tu infancia en sentido contrario.
3.- Nunca se quita la “mamitis”. Tú dijeras, “bueno, mira, nos esperamos a que se muera la señora”, ¡órale! Pero no, porque se muere la señora, ¡pero nace la leyenda!
4.- Yo tenía un novio que era “chichifito”, pero no importaba. Yo pagaba la renta, el súper, todo, pero no importaba porque este hombre tenía una… “Personalidad”. Bueno, ¿por qué crees que estoy ojona?
5.- Y una que ya se ha drogado, ¡sabe distinguir perfectamente bien un mareo natural de un mareo sintético!